VIERNES DIA 29 JUNIO 2018 ETAPA 44
Salgo de Lamia y he cambiado el recorrido para conocer otro mar más, el Egeo, aunque yo soy mas bien de tierra adentro.
Quiero ir a un pueblo turístico llamado KAMENA VOURIA No es mar abierto pero hay playa y además me ha reservado mi amigo Lambras un hotel que se llama "Alma" y es conocido suyo. Luego el sábado haré la etapa de aproximación, con 150 km y dejaré los últimos 25 para encarar unos extrarradios por una conflictiva zona de Atenas, pero Lambras dice que pasando un domingo a las cinco no tendré problemas. Y aquí lo que dice este griego loco va a misa.
Pero el que tiene que pasar soy yo.
No tengo miedo. ¿Qué me va a pasar? Que me den por cu..., pues una experiencia.
Esa será la única que no os cuente con seguridad, porque como estaré de espaldas no tendré detalles para informaros. Estoy en meta y a la orilla. Hoy corta, buen día, buena temperatura, aire a favor, habitación reservada. Buaaaa de lujo. He entrado en una iglesia ordodoxa por si sentía algo o oía alguna voz, pero no tengo ni cobertura ni conexión pues nadie me ha dicho nada.
Encienden muchas velas no se para qué.
Aquí hay muchos ortodoxos, entran igual señores, jóvenes, niños, de todo. Allí solo entran a las iglesias abuelos y pensionistas unos para pedir no morir y otros para que le suban la pensión según el IPC.
Esto de las religiones cada vez lo entiendo menos.
!Pero que devotos son!.
Juegan con unos rosarios que parece que tocan las maracas.
Lo de las religiones es alucinante extraño, enigmatico..
Y que me decís de un tío que se levanta a las cinco para hablar con Ala, coño llámale por la tarde después de la siesta y no toques los cojinetes.
Claro que hay otros que se levantan antes de las cinco para ir de un lado a otro en bici, coño coge el tren atontao.
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